Test de autodiagnóstico Covid | 21/julio/2021 .– Ante este anuncio del gobierno, muchas personas se preguntan: ¿Cuándo podemos adquirir en la farmacia estos test de autodiagnóstico y cuál hay que comprar?. Los test de diagnóstico que podemos comprar sin receta, llegan con el precio inflado y dudas sobre su eficacia según los expertos consultados. Además, preocupa la comunicación de los casos positivos con el sistema sanitario.
La venta libre y sin receta médica del test de autodiagnóstico del Covid-19 en farmacias será una realidad desde que se publique la orden del Consejo de ministros en el Boletín Oficial del Estado (BOE), «Era una medida muy reclamada», saludó ayer la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, omitiendo que los primeros en reclamarlos fueron los farmacéuticos y algunas comunidades autónomas como la de Madrid.
El Consejo de Ministros dio luz verde ayer al decreto que hace posible comprar test de antígenos y serológicos de forma rápida sin pasar primero por la consulta de un centro de salud o la de un hospital. Es una medida que las farmacias perciben como «positiva», ha declarado a los medios, Antonio Blanes, director de Servicios Técnicos en Consejo General de Colegios Farmacéuticos. «Creemos que es una herramienta más y que bien empleada puede ser de mucha utilidad para luchar contra el virus», señala.
Los ciudadanos que lo deseen podrán elegir entre dos tipos diferenciados de pruebas. «La de anticuerpos o serológica detecta si nuestro organismo ha estado en contacto con el virus y los test de antígenos revelan una infección activa», expone Blanes. El profesional aprovecha para aclarar que el test de anticuerpos no sirve para saber si somos positivos. Las pruebas de antígenos se pueden realizar mediante dos técnicas: nasal y bucal.
En cuanto a la dificultad de realizarse la prueba en casa, Blanes asegura que en la de tipo nasal se introduce el hisopo únicamente «2 ó 3 centímetros». Mientras que en la bucal, «la facilidad es mayor, lo único que hay que hacer es recoger una muestra de saliva». Para obtener el resultado hay que esperar alrededor de 15-20 minutos, similar a una prueba de embarazo.
Según explica Blanes, es una prueba destinada a obtener «información propia». Si el resultado es positivo hay que dirigirse a las autoridades sanitarias y efectuar una prueba PCR. En caso de dar negativo, tampoco es fidedigno. Los test tienen un mínimo de especificidad del 97% y sensibilidad del 90%. Es posible obtener falsos negativos, porque este tipo de pruebas poseen una sensibilidad menor que la PCR, además de ver su eficacia reducida si la carga viral es baja. Se aconseja hacer uso de estos test durante los siete primeros días desde la infección o en los cinco primeros desde la aparición de síntomas. «Si tuvimos el contacto ayer y nos hacemos la prueba hoy no será eficiente», opina Blanes.
Las farmacias piden garantizar que los positivos de auto-test aparezcan en los datos de coronavirus
Los farmacéuticos han reclamado que se aumente la colaboración con las administraciones para que los nuevos positivos detectados en estas pruebas queden reflejados en el Sistema Nacional de Salud para poder controlar la pandemia de la Covid-19. Así lo ha subrayado Antonio Blanes.
«Estamos ofreciendo a las autoridades la colaboración de las farmacias en la detección y comunicación de los positivos», ha manifestado Blanes, quien considera imprescindible «sacar todo el partido posible» a esta nueva herramienta para controlar los contagios.
Hasta ahora, los test de detección de Covid se vendían en las farmacias de algunas comunidades autónomas, aunque se exigía prescripción para adquirirlos y eran realizados por el propio farmacéutico.
«Si tuvimos contacto ayer y nos hacemos la prueba hoy no será eficiente»
A las farmacias llegan ocho test de cinco fabricantes diferentes. El precio final de los test lo fijará cada empresa, según el borrador inicial del Real Decreto Ley, que no impone restricciones, y estarán exentos de IVA. En opinión de Blanes, «rondará los diez euros», si bien podría ser más. En un principio, se dijo que costarían de 3 a 7 euros, un precio que choca con la venta en países como Alemania, donde se dispensan por treinta y pico céntimos.
En un primer momento, es difícil saber cuántos se venderán o qué acogida tendrán entre la población, pero de acuerdo con las previsiones de la empresa española de importación y distribución de material médico-sanitario Rypo, puede suponer un incremento
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